Autor: firmainvitadapj
11 diciembre, 2023
*Sara González*
Queridas y queridos Grinchs del mundo, este post es para vosotr@s, no estáis solos, yo también odio la Navidad y eso está bien.
Estoy cansada de leer cosas maravillosas de la Navidad pero ni una negativa, ¿qué pasa, que todo el mundo adora esa época? No me lo creo, y como tod@s tenemos cabida, aquí promuevo mi carta de odio a la Navidad.
¿Por qué la odio?
Paso a enumeraros los motivos por los que odio esta época.
- ¿Por qué motivo tiene que hacer tanto frío? Lo siento, no veo ventaja en salir a la calle y morirme de frío, además de llevar más capas que una cebolla, para seguir teniendo frío.
- ¿Por qué cada vez llega antes? Literalmente el 31 de octubre ya no quedan cosas de Halloween en las tiendas, cada año llega antes, ¿de verdad? Dejadnos disfrutar de cada época, no hay prisa, no veo que adelantéis el verano.
- El maldito, pesaroso y horrible Black Friday (que, encima, cada vez dura más). Es un bombardeo constante de compras, más compras, anuncios, más anuncios y más compras por esos anuncios. ¡Dejadme en paz! ¡Sólo quiero ver vídeos de perritos en Instagram!
- Los malditos regalos (y el estrés de comprarlos). De repente tienes que comprar cincuenta regalos: a tus padres, hermanos y hermanas, sobrinos y sobrinas, tíos, tías, abuelos, abuelas, primas que no ves en quince años…¡Es que es Navidad! ¡Hay que regalar! ¿No podemos regalarnos en primavera cuando los centros comerciales y todas las tiendas no estén atestadas de gente? ¿Cuando no dé agonía vital entrar en centro comercial? ¿Es necesario tener que comprar tantos regalos hasta casi arruinarte para encima luego devolver la mitad porque no te gustan?
- Amigos invisibles y cenas. Parece que todo el mundo se pone de acuerdo en querer hacer cenas de navidad y amigos invisibles (más regalos), de repente te ves en cenas sin sentido regalando algo a alguien que casi ni sabe cómo te llamas. ¿Qué sentido tiene todo esto?
- Recuerdas esas Navidades felices en las que estaban todos los que querías, que, lamentablemente, con el paso del tiempo, van yéndose. Estas fechas te hunden en la miseria recordando a tod@s aquell@s que ya no están, es realmente doloroso.
- Ansiedad social. ¿Y si quiero quedarme en mi casa? ¿Por qué tiene que verse mal odiar la Navidad? ¿Por qué no puedo quejarme de todo esto? ¡Basta ya!
Creo que son suficientes motivos. Podría seguir, pero creo que os podréis sentir identificados e identificadadas. No estáis solos, que no os hagan creer que no tenemos derecho a odiar estas fechas: lo tenemos.
¡Feliz “Queda un día menos para que acabe este infierno”!
*Sara González* es graduada en Publicidad y Relaciones Públicas. Su trayectoria profesional se ha centrado en el marketing y la transformación digital en diferentes sectores, actualmente trabaja en el área Digital de Fad Juventud. Es una apasionada de los libros, de la música, de su sobrino, y de la innovación digital, además de ser una foodie encubierta.