Son continuos los proyectos solidarios públicos y privados que llaman a la participación juvenil y que cada año aumentan su respuesta positiva. Así ha ocurrido con el Programa ‘Voluntariado Joven’ de Castilla y León. En este caso, los jóvenes se implican en actividades del ámbito de la discapacidad, la tercera edad, la infancia, el refuerzo educativo o el apoyo en el medio rural.
De año en año, este proyecto ha ido aumentado su participación en esta comunidad autónoma, un ejemplo de la efectividad de la unión entre jóvenes y solidaridad. En este caso, se trata de una iniciativa que pone de manifiesto el compromiso y la labor que desarrollan en la Comunidad más de 1.400 jóvenes voluntarios y más de 220 organizaciones de voluntarios.
Las funciones a desempeñar por las entidades en ‘Voluntariado Joven’ son el impulso al voluntariado, ayuda en la selección y valoración de los aspirantes a ser voluntarios, formación permanente de los voluntarios, así como la organización y realización de las actividades concretas de voluntariado en cada una de las provincias o ámbitos geográficos determinados.
Además, a través del programa Erasmus+, los jóvenes también acceden al Servicio de Voluntariado Europeo, mediante el intercambio de voluntarios entre distintos países.
En cuanto a los campos de trabajo, se están impulsando en este verano nueve instalaciones para jóvenes voluntarios en Castilla y León, para los que se han ofertado 368 plazas, lo que supone cuadriplicar las 88 plazas que se ofertaron hace cuatro años, debido a la demanda realizada por parte de los jóvenes.
A esta oferta se suma la posibilidad de formarse como voluntario en otras comunidades autónomas o también la oferta del Servicio de Voluntariado Internacional, gestionado por el Instituto de la Juventud de España, en campos de trabajo en el extranjero.