*Irma Lima, Amanda Quijano y Rosy Bonilla
Desde 2018 Fad y la Colectiva Feminista para el Desarrollo Local hemos realizado un trabajo conjunto de promoción de cultura de paz y de los Derechos Humanos de las Mujeres y Juventudes en la capital de El Salvador, San Salvador. En ese marco, una de las principales acciones que hemos impulsado es el desarrollo del proyecto “Contribuyendo a dinamizar ciudades seguras, equitativas y democráticas para las juventudes del municipio de San Salvador”, financiado por el Gobierno de Cantabria y ejecutado entre el 15 de diciembre de 2019 y el 14 de abril de 2021.
Al igual que la mayoría de capitales de la región Centroamericana, el contexto de San Salvador se caracteriza por altos índices de violencia social, la cual se percibe en su mayoría en áreas urbanas con altos índices poblacionales. Estas expresiones de violencia impactan de manera específica y diferenciada en las mujeres y juventudes a partir del uso, acceso y utilización de los espacios públicos.
Por ello, a través de este proyecto hemos llevado a cabo diversos diagnósticos teniendo en cuenta la visión de los y las jóvenes sobre las principales problemáticas para su uso y disfrute de la ciudad. Contar con ellos y ellas nos ha ayudado a habilitar espacios como parques, plazas, zonas verdes o canchas deportivas para uso juvenil.
Estas acciones han contado con la participación de 147 jóvenes líderes y lideresas, 34 hombres y 113 mujeres pertenecientes a diferentes barrios y comunidades de San Salvador, los cuales cuentan, a su vez, con herramientas para promover la implicación de otras mujeres y hombres en los espacios públicos de sus colonias y barrios.
La pandemia COVID-19 nos supuso todo un reto dadas las limitaciones de movilidad derivadas de los confinamientos, pero, lejos de “rendirse”, chicos y chicas buscaron alternativas e hicieron “suyas” herramientas digitales como redes sociales y plataformas de comunicación comunitarias.
Todo ello con el fin de continuar posicionando acciones en favor de la cultura de paz y convivencia social, para seguir promoviendo concursos virtuales y festivales artísticos a través del entorno virtual. ¡Bravo por ellos y ellas!
En el marco de esta intervención, también llevamos a cabo una escuela on line de formación integral sobre ciudades seguras y equitativas. Así, a través de un total de ocho sesiones, trabajamos la promoción y el fortalecimiento de las capacidades en gobernanza y cogestión ciudadana de jóvenes líderes y lideresas.
Además, realizamos un diagnóstico y diversas auditorias urbanas en colaboración con estos y estas jóvenes, lo que nos permitió conocer su realidad en San Salvador así como el uso y disfrute de los espacios públicos que pueden realizar. Para ello, llevamos a cabo una serie detalleres en los que elaboramos mapas georreferenciados en los que se identificaron puntos de la ciudad inseguros, con falta de iluminación, solos, publicidad sexista, entre otros.
A través de este proyecto también hemos puesto el foco en la prevención de la violencia y la promoción de la igualdad entre hombres y mujeres a través del arte, la creatividad y la recreación. Chicos y chicas contribuyeron a esta causa a través de un concurso en el que presentaron sus propuestas para construir una ciudad de San Salvador inclusiva.
A través de esta intervención, Fad y la Colectiva Feminista hemos comprobado, una vez más, la resiliencia, la creatividad y la fuerza de las juventudes para mejorar la convivencia y la prevención de la violencia. Juntos y juntas han conseguido sentirse parte de su comunidad fomentando la corresponsabilidad a la hora de abordar las problemáticas existentes. Escucharles y darles voz nos recuerda que las juventudes pueden cambiar lo imaginable y ser los artesanos y artesanas de las ciudades que todas y todos soñamos.
*Irma Lima es maestra en desarrollo local y estudios de género y una firme defensora de los Derechos Humanos, Amanda Quijano es activista feminista y especialista en Cultura de Paz, y Rosy Bonilla es relacionista internacional y especialista en trabajo con juventudes. Las tres son aliadas y compañeras de “faena” de Fad Cooperación en El Salvador.