Las ayudas para la incorporación de jóvenes al sector agrario es una de las prioridades de comunidades como Andalucía, Castilla-La Mancha y Castilla y León. Por ello, se están multiplicando las ayudas para que este colectivo forme parte del relevo generacional de un área de empleo muy importante en el país y que también se está tratando de impulsar desde el Gobierno central.
De hecho, la ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, ha llegado a asegurar recientemente que el Ejecutivo prevé la incorporación de hasta 20.000 jóvenes al sector agroalimentario durante esta legislatura, es decir, hasta el año 2020, y ha añadido que trabajarán con el fin de conseguir “un sector más atractivo”.
El Gobierno quiere aumentar la competitividad de este sector, para lo que considera necesario apostar la innovación, la incorporación de las nuevas tecnologías, así como el fácil acceso tanto de los jóvenes como de las mujeres a la agricultura, sobre todo en aquellas regiones que, como las mencionadas, tienen en este sector buena parte de su peso económico.
La ministra ha recalcado la importancia del relevo generacional en el sector agrario, “donde los jóvenes y las mujeres serán los principales ejes sobre los que gire la estrategia nacional de modernización y diversificación rural”. Con ello se ha referido también a aquellas zonas de mayor despoblación donde la población juvenil puede cumplir un papel fundamental en el desarrollo rural.
En este contexto jugará un papel muy relevante durante los próximos años la futura Política Agraria Común (PAC) así como la consolidación del sector en los mercados internacionales. “Desafíos importantes”, ha dicho Tejerina, que cree que las futuras generaciones podrán llevar adelante “con las medidas adecuadas” para la generación de puestos de trabajo.