Ante un contexto de elevado desempleo juvenil, las instituciones europeas cada vez vuelcan más esfuerzos en incentivar que los y las jóvenes emprendan sus propios negocios, como medio para facilitar su inserción en el mercado de trabajo. En este sentido, varios países europeos han introducido medidas de apoyo a la iniciativa empresarial juvenil. Sin embargo, estas medidas varían considerablemente en cuanto a su contenido y objetivos, de unos países a otros.
Teniendo en cuenta esto, desde Eurofound, se ha elaborado un informe que ha tenido por objetivo ofrecer una visión global de las actuales medidas de apoyo a los y las jóvenes para la creación de nuevas empresas, así como examinar las evaluaciones de impacto que se han hecho sobre algunas de estas medidas. De este modo, se ponen de relieve algunas cuestiones sobre lasmetodologías utilizadas y las limitaciones de las evaluaciones. A continuación, se presentan algunas de las principales conclusiones extraídas del resumen ejecutivo.
En lo referido a las medidas de apoyo a la creación de nuevas empresas, el informe señala que todos los Estados miembros aplican medidas que encuadran en la política de fomento de la iniciativa empresarial, de las cuales, muchas son específicas para jóvenes, dadas las elevadas tasas de desempleo juvenil. No obstante, no pocas de las intervenciones son de carácter temporal y están dotadas de recursos limitados, lo que puede disminuir su impacto. Sin embargo, y según el informe, su eficacia podría verse reforzada, si éstas se enmarcaran en políticas de fomento (integrales y bien coordinadas) de la iniciativa empresarial.
Además, y a pesar del creciente número de iniciativas empresariales promovidas por jóvenes, muchas medidas de apoyo a la creación de empresas son de aplicabilidad limitada, ya que imponen estrictos criterios de selección. De los programas analizados, los más apropiados ofrecen ayuda para la fase previa a la creación de la empresa, dada la ausencia de experiencia laboral y de las competencias empresariales básicas.
En lo referido a la evaluación de las políticas aplicadas, el informe refleja que el creciente interés por la iniciativa empresarial de los y las jóvenes no ha ido acompañado de evaluaciones sólidasque estudien el impacto producido por las medidas. Tan sólo tres de las evaluaciones de impacto analizadas (las correspondientes a Francia, Reino unido y Suecia) han sido consideradas como efectivas a la hora de registrar el impacto real de estas políticas en la empleabilidad juvenil. El resto de evaluaciones, más que evaluaciones de impacto, han sido ejercicios de seguimiento dirigidos a obtener información sobre los programas y la opinión de los y las participantes sobre diferentes aspectos de los programas.
Consecuentemente, muy pocas evaluaciones han examinado la magnitud real de los posibles efectos de inercia (los que se habrían producido sin las medidas de apoyo) y de los efectos de desplazamiento (las consecuencias negativas para las empresas competidoras) resultantes de las medidas aplicadas para el fomento de la iniciativa empresarial. Por tanto, resulta necesario que, para lageneración de políticas que intervengan positivamente en la creación de empleo y emprendimiento juvenil, se realicen unos procesos de evaluación que tengan unas metas claramente definidas y con unos objetivos cuantificables susceptibles de ser comparados.