No sabría decir qué empezó antes, si el problema con los porros o los síntomas de ansiedad, pero puedo asegurar que una cosa me arrastra a la otra.
Los porros me ayudan a tener la mente libre de pensamientos negativos y me tranquilizan. Por otro lado, me mantienen en una sensación de distanciamiento que muchas veces me preocupa. Últimamente ya no me interesan las conversaciones de mis amigos, paso de hablar con mi padres cuando llego a casa (siempre están intentando controlarme y me sacan de quicio), y cada día estoy más desconectado de las clases. Solo me apetece fumarme un porro y que me dejen en paz. Pero estos días, la cosa ha ido a peor. Llevo un par de semanas sin salir apenas de casa, porque cada vez que salgo me agobio, empiezo a hiperventilar y me mareo. Me da miedo incluso coger el coche, por si empiezo a marearme en mitad de carretera. He ido al médico y me han hecho análisis, pero en los resultados no han visto nada que pueda explicar esos síntomas. Entre otras cosas, me han recomendado dejar los porros, pero me siento incapaz de arrancar el día sin fumar. Fumo una media de siete u ocho porros al día. Y sí, me han derivado a salud mental, pero hay mucha lista de espera. ¿Podéis ayudarme desde el SIOF Joven?
*Caso ficticio basado en consultas reales recibidas en el SIOF Joven.
El cannabis es la sustancia psicoactiva ilegal de mayor consumo en España, en la población de 15 a 64 años. Por término medio, el consumo de esta droga comienza antes de cumplir los 15 años (1).
Cuando hablamos de consumo de cannabis, no siempre nos estamos refiriendo a la existencia de un problema. Esto va a depender de otros factores, como la relación que la persona tiene con esa droga, o de su forma de consumirla.
La mayoría de jóvenes que consumen cannabis lo hace de forma ocasional y recreativa: para relacionarse, sentirse parte del grupo, desinhibirse, etc. Sin embargo, algunas personas empiezan a fumar con estos fines, pero poco a poco van encontrando en el consumo una forma de evadir emociones como la ansiedad o la tristeza. De esta manera, fumar porros se puede llegar a convertir en una forma de afrontar el malestar psicológico y emocional.
Seguro que tienes algún amigo que dice que “él controla” y que “solo fuma cuando quiere” y puede que sea verdad, pero esto no “funciona” igual para todas las personas, ya que el THC, principal sustancia psicoactiva del cannabis, puede llegar a generar adicción.
Algunos de los riesgos a largo plazo asociados al consumo problemático de cannabis son los siguientes: ansiedad, problemas de atención y memoria, sintomatología psicótica, enfermedades respiratorias, etc (2).
A pesar de conocer los riesgos, dejar los porros puede llegar a ser un camino largo ya que, al igual que pasa con otras drogas, a muchas personas les compensan los beneficios de consumirlas frente a los perjuicios que pueden llegar a suponer estos riesgos para la salud.
Cuando chicos y chicas contactan con el SIOF Joven por un problema con los porros nos suelen explicar cómo les afecta el consumo en su día a día, comparten con nosotras sus emociones y preocupaciones al respecto, y nos piden ayuda para dejar o reducir el consumo. Nosotras, a través del diálogo, les acompañamos para que logren entender mejor las causas de su consumo y conozcan algunas de las claves de su mantenimiento.
Por otra parte, les damos apoyo y estrategias para regular las emociones de una manera más saludable, les intentamos motivar para que realicen algunos cambios de hábitos (hacer deporte u otra actividad saludable, evitar contextos de consumo, etc.), y, en general, tratamos de que tomen conciencia de la importancia del autocuidado personal.
En los casos en los que lo vemos necesario, también damos información de los recursos asistenciales de drogodependencias, públicos o subvencionados, que tienen en su zona.
Si crees que el consumo de porros se está convirtiendo en una necesidad para ti y/o sientes que te está afectando, o si sientes malestar psicológico y emocional, no dudes en contactar con el Servicio de Información y Orientación Joven de Fad (900 161515, teléfono anónimo y gratuito, o WhatsApp 623 22 05 70). Un equipo de expertas te ofrecerá orientación, información y apoyo emocional de 9 a 21h de lunes a viernes.
AUTORA DEL POST: Alba Mengual, psicóloga sanitaria, y experta en Adicciones y Familia. Alba Lleva 10 años en Fad atendiendo el SIOF (Servicio de Información y Orientación de Fad) y colaborando en el departamento de Familias. Gracias a la calma que transmite y a su gran sonrisa, es capaz de conseguir que todas las personas que atiende terminen el día con un poco más de luz en su interior. Es madre de un niño llamado Kai y, cuando tiene tiempo, consumidora empedernida de música, cine, series y libros.