*Alba Mengual
Iván nos llama al Servicio de Información y Orientación de Fad (900 16 15 15), preocupado porque su hija Arancha, de 16 años, está “enganchada” al móvil y a la tablet todo el día.
A pesar de que ya han acordado en varias ocasiones unas normas de tiempo de uso, acaban discutiendo a diario porque Arancha no las cumple. El padre siente mucha frustración, ya que el ambiente familiar cada día es peor como consecuencia de esos conflictos. Le gustaría saber cuánto tiempo debería dejarle usar estos dispositivos a su edad y qué debería hacer si su hija no lo cumple.
Cuando le preguntamos para qué usa el móvil o en qué aplicaciones se mete, Iván no sabe qué responder, lamenta no saber demasiado de tecnología y no conocer las app que descarga su hija.
El padre nos explica que antes tenía muy buena comunicación con Arancha, pero dice que ya apenas le cuenta sus cosas porque siempre están enfadados por estos conflictos.
(El caso de Iván y Arancha es ficticio, pero está inspirado en algunas consultas que recibimos en el SIOF sobre el uso de pantallas).
A menudo, padres y madres, cuando pensamos en educar en el uso adecuado de pantallas, nos centramos únicamente en el tiempo de uso, o en determinar algunas prohibiciones.
Es muy importante gestionar el tiempo de pantalla, pero también lo es que aprendan a contrastar la información que les llega a través de redes sociales, que sepan respetar a las personas con las que se relacionan mediante cualquier medio, que tengan acceso a contenidos adecuados en función de su desarrollo, que conozcan la configuración de privacidad, etc.
A continuación os indicamos algunas recomendaciones que pueden ayudar en la educación y prevención del uso de pantallas:
- Favorecer una autonomía digital de forma gradual. Es recomendable que empecemos a hablar de la vida digital con nuestros hijos e hijas antes de la adolescencia e ir adaptando el uso en función de la edad y características personales.
- Buscar el equilibrio entre la vida online y offline. Consensuar unas normas de uso, ofrecerles alternativas de ocio sin pantallas (actividades deportivas, paseos al aire libre, etc.) y mostrar un buen ejemplo (no conectarnos durante la comida, compartir rutinas, etc.), nos facilitará este objetivo. Anticiparnos y hablar de lo acordado, antes que prohibir o castigar, nos ayudará a evitar conflictos.
- Integrar y normalizar el uso de pantallas. Convivimos con la tecnología y podemos incorporar su uso al resto de la educación. Asimismo, compartir momentos de ocio digital en familia (jugar a videojuegos todos juntos, por ejemplo) nos permitirá fortalecer vínculos y transmitir valores. Si ponemos los dispositivos en lugares comunes de la casa, podremos llevar una mejor supervisión.
- Favorecer la comunicación en la familia. Mantener la afectividad y el diálogo con nuestros hijos e hijas será clave para poder acompañarles en sus experiencias en la red. Cuestionar con curiosidad y hacerles reflexionar sobre los contenidos a los que acceden, evitando aleccionar y juzgar de primeras, nos ayudará a que desarrollen el pensamiento crítico.
- Formarnos en alfabetización digital y seguridad en la red. No es necesario que seamos expertos tecnológicos, pero sí que nos pongamos al día para poder acompañarles, también, en el ámbito digital. Hay cursos de formación, por ejemplo, este verano Educación Conectada mantiene abierta la inscripción en el curso online gratuito “Familias digitales”, dirigido a madres y padres que deseen bucear con sus hijos e hijas por la nueva cultura digital. Y páginas web en las que podemos encontrar información como Internet Segura 4 Kids, Iwomanish y Empantallados.
- Aportar valores y ayudar a regular sus emociones. Algunas experiencias que se viven en la red, pueden convertirse en oportunidades para transmitir y afianzar valores como el respeto, la tolerancia, la empatía, etc.
- Fomentar el desarrollo de sus competencias digitales para conseguir una mejor adaptabilidad en el mundo actual. Ayudarles a sacar provecho de las pantallas tanto para su formación académica y profesional, como para poder profundizar en sus intereses y hobbies.
Si tienes alguna consulta en relación al uso de pantallas, o cualquier duda sobre educación y prevención de conductas de riesgo, cuenta con el Servicio de Información de Fad: 900 16 1515.
Atención de lunes a viernes de 9 a 21h (de 9h a 15h en agosto). Es un servicio confidencial, anónimo y gratuito.
*Alba Mengual es psicóloga sanitaria, y experta en Adicciones y Familia. Lleva 10 años en Fad atendiendo el SIOF (Servicio de Información y Orientación de Fad) y colaborando en el departamento de Familias. Gracias a la calma que transmite y a su gran sonrisa, es capaz de conseguir que todas las personas que atiende terminen el día con un poco más de luz en su interior. Es madre de un niño llamado Kai y, cuando tiene tiempo, consumidora empedernida de música, cine, series y libros.